Editoriales

jueves, 26 de mayo de 2011

Julio Meinvielle, Teólogo de la cristiandad

Definición y caracterización de la Cristiandad en Julio Meinvielle:

El tema de la Cristiandad, como lo señalaba Sacheri, es recurrente en la obra de Julio Meinvielle. Nos encontramos en ella con varias caracterizaciones de la “ciudad católica” (una de sus locuciones sinónimas). En uno de sus tempranos escritos sobre teología de la Historia la define como “conjunto de pueblos que públicamente se propone vivir de acuerdo con las leyes del Santo Evangelio, de las que es depositaria la Iglesia”. La noción de Cristiandad, pues, implica la conformidad del derecho público interno e internacional con la enseñanza de la Iglesia y el magisterio del Romano Pontífice. En concreto, el núcleo substantivo de la Cristiandad consiste en un reconocimiento de la divinidad de Cristo manifestado no por meros actos de culto sino por la legislación que regula la vida del Estado. Los pecados de los pueblos cristianos, antes de la revolución francesa, por graves que fuesen, no incurrían con todo en impiedad colectiva y pública. La noción de Cristiandad, pues, no implica la ausencia de toda injusticia; pero sí resulta contradictoria con el pecado de la impiedad política, consistente en negar la realeza de Cristo y la vigencia pública de su ley; consistente, en suma, en “el desconocimiento total de la soberanía espiritual” de la Iglesia por parte de la sociedad cristiana.

Como presupuesto de una legislación humano-positiva subordinada al Evangelio se encuentra el principio fundamental de la verdadera Cristiandad, a saber, “que la autoridad pública debe profesar públicamente la Religión Católica”. Esta profesión de la fe por el poder del Estado, contraria a toda neutralidad religiosa de la esfera pública, conlleva necesariamente, por la fuerza misma de la ejemplaridad del imperio político y legal, la irradiación y promoción, por los medios y vías propios de la legislación positiva, de la verdad católica sobre el conjunto del orden comunitario. El autor cita en abono de su posición las inequívocas afirmaciones de las encíclicas Quanta cura (Pío IX) e Inmortale Dei (León XIII). Para Meinvielle, en consonancia con esos pronunciamientos papales, resulta ilícito proponer una autoridad política que se mantenga “ajena” a toda religión. En efecto, la norma de vida pública, en la ciudad católica, debe ser católica. No otra ha sido, por lo demás, la posición de Tomas de Aquino en De regno, citada también por nuestro autor: “A aquél a quien pertenece el cuidado del fin último [en última instancia, el Romano Pontífice] deben sujetarse aquéllos a quienes pertenece el cuidado de los fines antecedentes [los príncipes]"

En síntesis, y tal como lo había afirmado en Concepción católica de la política, su primera obra filosófico-política de envergadura, el fin de la persona individual es análogo al fin de la sociedad política, dado que el fin de ésta (aunque complejo, plural y participable por muchos) es humano por la naturaleza del bien que lo conforma. Por ello así como el hombre cristiano profesa la fe en Cristo y en su Iglesia –y guarda sus mandamientos-, así la sociedad política cristiana, análogamente, acepta las normas de la ley natural y de la ley evangélica tales como las propone la Iglesia.

JULIO MEINVIELLE, TEÓLOGO DE LA CRISTIANDAD” por Sergio R. Castaño (Verbo nº 491-492).


martes, 24 de mayo de 2011

Los "medios de comunicación" al servicio de la plutocracia y de la mentira institucionalizada

En una dictadura, el estado se apropia de los medios de comunicación. En democracia, el propietario de los medios de comunicación se apropia del estado

Me propongo hablar en lo que sigue sobre la iniquidad de la gran prensa capitalista moderna, sobre su función de viciar y desinformar a la opinión pública y de poner el poder en manos innobles (...)

Esta prensa capitalista ha acabado como mínimo, por distorsionar cualquier juicio. La ínfima oligarquía que la controla es irresponsable y tiene la sensación de ser inmune. Ha llegado a creer que puede suprimir cualquier verdad y sugerir cualquier falsedad. Gobierna, y gobierna de modo abominable (...)

Lo que ha aparecido aquí es una organización de la prensa en apoyo y favor del sistema de la política profesional que impregna a todos nuestros actuales grandes periódicos capitalistas de Inglaterra (...)

El régimen bajo el que vivimos ahora es una plutocracia que ha reemplazado gradualmente a la vieja tradición aristocrática inglesa. Esta plutocracia -los intereses de unos pocos ricos- controla en parte, se expresa en parte, se identifica en parte con los políticos profesionales, y tiene en la actual prensa capitalista un aliado semejante a esa "prensa oficial" (...) cubre todo el espectro. No tienen ningún competidor en el campo de los grandes periódicos (...)

Mucho peor es ser gobernado por una camarilla de políticos profesionales que embaucan a la multitud con un simulacro de "democracia".

Pero lo intolerable es que un poder como ése deba residir en manos de oscuras nulidades sobre las que no se podría hacer uno ninguna ilusión, cuya tiranía no está admitida ni es pública, que ni siquiera se arriesgan a mostrar sus rostros, y a los que no se les puede pedir ninguna responsabilidad (...)

Hilaire Belloc. La prensa libre. Ensayo sobre la manipulación de las noticias y de la opinión pública, y sobre cómo contrarrestarla

Hilaire Belloc: El "mundo moderno" construído sobre el dinero y la herejía.

domingo, 22 de mayo de 2011

MONARQUÍA REAL YA: Campaña de la A.E.T

Propaganda de la campaña en las calles y plazas de Salamanca

UNIVERSIDAD REAL YA- MONARQUÍA REAL YA!!!!!!!

«Democracia real ya», están pidiendo algunos. Muchos de ellos bienintencionados, pero desorientados. Otros quizá no tanto. Como si un enfermo de cáncer pidiera tumores «de verdad». Porque democracia, democracia liberal y socialista («socialista a fuer de liberal», en frase del oligarca revolucionario Indalecio Prieto, de infausta memoria), tenemos. Tenemos y sufrimos: la «democracia» es el más refinado experimento totalitario.

Lo que no tenemos es Monarquía. Monarquía, que es el régimen popular por excelencia. Que es el régimen legítimo y representativo. Que es el régimen constitutivo de España: España, las Españas, es una Monarquía. Como no tenemos Monarquía, no tenemos independencia, ni justicia. No tenemos Cristiandad. No tenemos Universidad, que es la institución más perfecta del Antiguo Régimen. (Entiéndase por Antiguo Régimen el anterior a la Revolución liberal. Sí, esa que robó los bienes de la Universidad y echó de ella a las mujeres, aunque luego nos haya venido con socialismos y feminismos).

Desde la Agrupación de Estudiantes Tradicionalistas seguiremos trabajando por mejorar la Universidad que tenemos, lo poco que de Universidad nos queda. Pero sin perder de vista que buscamos la restauración de todo un mundo. UNIVERSIDAD REAL YA. Y esa restauración exige MONARQUÍA REAL YA. Real por verdadera: no la farsa de esta república parlamentaria coronada. Real por legítima; con la verdadera Familia Real al frente, sin sucedáneos.

sábado, 21 de mayo de 2011

Gestas hispánicas catalano-aragonesas: Batalla en las Puertas de Hierro

Aunque generalmente el mejor momento para la pelea no es después de una fatigosa caminata, las precauciones tomadas por el megaduque Roger de Flor (capitán de la Compañía almogávar) –recordemos que optó por una marcha lenta- y la dureza de la tropa almogávar ponían a los turcos frente a unos hombres preparados para la lucha y dispuestos a demostrar una vez más que podían deshacer a quien se pusiera en su camino.

Al despuntar el nuevo día se colocaron los dos ejércitos en formación de batalla, según las respectivas estrategias que cada uno de sus jefes había elaborado de antemano. Es interesante resaltar que en este combate todo se libraba a una sola carta, ya que ambos eran conscientes de que la derrota significaría su completa destrucción. Los almogávares, lejos de sus bases, no tendrían ocasión de llegar a ellas en caso de ser vencidos, y no podían contar con que la población bizantina les brindase apoyo alguno; los turcos habían reunido los restos de las tropas derrotadas con anterioridad por la Compañía y tampoco podían esperar mucho de las poblaciones que antes dominaban.

Los otomanos habían reunido un ejército de 20.000 infantes y 10.000 hombres a caballo; los almogávares reunieron entre todos sus efectivos disponibles una cifra que no debió ser muy superior a 5.000 hombres. Roger, a pesar de la más que evidente desproporción de fuerzas, lejos de proponer a los suyos una retirada, lo cual era razonable, aprestó a sus hombres para el encuentro que se avecinaba. La caballería, a su mando, iría por la izquierda y la infantería, al mando de Rocafort, por la derecha.

Sinceramente, es difícil ponerse en el lugar de un hombre que ante sí tiene una formidable muralla de avezados guerreros y a sus espaldas la nada por refugio. Sólo le queda matar o morir con honor ante semejante enemigo. ¡Qué victoria tan grande sería empujar a los señores de Asia Menor más allá de las Puertas de Hierro! Parecía como si el cuerpo y el alma del almogávar se fundieran con la tierra que pisaba, resurgiendo con una acometividad que no parecía humana.

El enfrentamiento tiene lugar el 15 de agosto de 1304. Los almogávares creen que es un buen presagio que ese día sea la fiesta de Santa María de Agosto y, tras desearse suerte y a la señal de ¡Desperta Ferre!, se lanzan como lobos a la lucha, dejándose caer sobre las tropas turcas que, igualmente embravecidas, atacaban a la hueste. El choque de ambos ejércitos fue brutal. La desigualdad de efectivos hizo que, en un momento dado, flaqueara el ánimo de la Compañía ante la pesada fuerza que sobre ellos se había descargado, pero a los gritos de ¡ARAGÓN! ¡ARAGÓN!, todos a una se lanzaron con mayor ímpetu sobre sus adversarios y, con precisión quirúrgica, se abrieron camino entre las filas enemigas logrando finalmente doblegar la enorme resistencia turca.

La caballería había tenido desde el principio mejor suerte. Como en anterior ocasión, siendo la mandada por Roger pesada y ligera la turca, el encuentro favorecía a los almogávares. Los turcos, después de cada oleada, tenían la necesidad de replegarse y volver a formar sus cuadros para lanzarse nuevamente a la carga; la caballería del megaduque sin embargo, debido a su contundencia, aplastaba las formaciones turcas en cada embestida. El signo de la batalla era, pues, favorable a la Compañía ya que, disuelta la caballería turca y machacada la infantería, caballeros e infantes se dieron a la fuga, ordenando Roger de Flor su persecución hasta la puesta del sol.

Se retiró la hueste a descansar después de extenuante combate que había librado y de los muchos kilómetros realizados que también debían de hacer pesadas sus piernas. Cuando empezó a clarear el nuevo día, pudieron comprobar su victoria en toda su extensión: 12.000 infantes y 6.000 hombres de a caballo habían perecido a sus manos. Como justo tributo a la bravura almogávar 18.000 cadáveres sembraban las llanuras de las cordilleras del Tauro. Éstos soldados habían demostrado, una vez más, cuan magnífica gesta pueden realizar unos hombres que, a la hora de enfrentarse con el enemigo, ponían más empeño en conservar el honor que la vida.

Ricardo de Isabel Martinez. Almogávares

miércoles, 18 de mayo de 2011

El Carlismo ante las próximas elecciones: Rechaza el sistema, no entres en su juego.

Elecciones autonómicas: Abstención
Elecciones municipales: Abstención o voto a candidaturas independientes

El domingo 22 de mayo de 2011 se celebran elecciones municipales y también a la mayoría de las "comunidades autónomas" que desfiguran y suplantan a las regiones históricas de España. No se presentan candidaturas carlistas. Para los tradicionalistas, y en general para los españoles de bien, no resulta lícito dar el voto a ninguno de los partidos políticos y coaliciones de ámbito nacional. Tampoco a partidos o coaliciones de signo nacionalista regional.

En muy contados casos será posible dar el voto en las elecciones municipales a candidaturas independientes (siempre que lo sean verdaderamente, sin lazos con partido político alguno); para lo cual será necesario tener certeza de que se trate de candidatos de absoluta rectitud de principios e ideas, y examinar con cuidado sus programas.

El proceso electoral en curso --de por sí ilegítimo-- está, además, viciado por la normativa electoral vigente, ejemplo de totalitarismo, incongruencia y corrupción legalizada. Sea quien fuere quien afirme lo contrario, no existe obligación alguna de participar en el mismo: la abstención es no sólo una opción legítima, sino seguramente la más legítima de todas. En el caso de las próximas elecciones autonómicas, la abstención resulta obligada, sin excepción.

Mayo de 2011

Secretaría Política de S.A.R. Don Sixto Enrique de Borbón

En el Principado de Cataluña, a las candidaturas que se presentan en los distintos municipios bajo la etiqueta de Plataforma por Cataluña (PxC) debe aplicárseles el mismo criterio que a las candidaturas independientes en el resto de España. Esto es: hay municipios donde presentan candidatos dignos de recibir el voto, y municipios en los que no se les puede apoyar. Las personas con derecho a voto deberán examinar cuidadosamente dichas candidaturas.

martes, 17 de mayo de 2011

Libros para el camino, en La Librería Católica

Valiván es una empresa familiar católica que realiza vídeos con las parábolas de Jesús. Son graciosos, divertidos y, sobre todo, evangelizadores, pues acercan el corazón de los niños al Corazón de Jesús. Tenemos una oferta especial para estas fechas en que muchos niños hacen su Primera Comunión, si se compran los tres vídeos.

Por otro lado, la editorial Gaudete sigue adelante con sus proyectos; os presentamos su última publicación: “Guía católica para el Camino de Santiago”. Será una buena preparación para aquellos que van a emprender el Camino y una buena lectura para los que se queden en casa.

También le sugerimos una novela que le enganchará desde la primera página “Señor del mundo”: un relato profético que cuenta el discurrir de la sociedad moderna por dar la espalda a Dios de tal manera que fácilmente se produce el surgimiento del Anticristo.

In Domina nostra,
La Librería Católica

P.D. Le invitamos a visitar también nuestro catálogo y le recordamos que si no encuentra algún libro sólo tiene que solicitárnoslo y lo buscamos para usted

domingo, 15 de mayo de 2011

Presentación de la Revista Fuego y Raya en Buenos Aires: Hispanidad y Tradición

Se presentó en el Salón San Martín del Centro de Oficiales de las Fuerzas Armadas de la Ciudad de Buenos Aires, Fuego y Raya. Revista semestral hispanoamericana de historia y política.

Luego de una breve introducción a cargo de Emilio Hardoy, con la presencia de numerosos letrados y destacados intelectuales, el director de la revista, abogado y profesor Juan Fernando Segovia hizo un esbozo de la historia de la creación y la aparición de la publicación semestral Fuego y Raya. Colaboraron en la presentación del Dr. Luis Roldán destacado profesor de la Pontificia Universidad Católica Argentina y el licenciado Andrés Lagalaye Falcionelli.

Juan Fernando Segovia, quien viajó a Buenos Aires para la realización de este evento, comenzó la conferencia describiendo la finalidad y contando a la audiencia como había surgido la idea de realizar la publicación.

Explicó Segovia que la revista, que ya imprimió su segundo número, es una realización que se encuentra ligada a un ente mayor; el Consejo de Estudios Hispánicos Felipe II, bajo el patrocinio de la Fundación Francisco Elías de Tejada, entidad española dirigida por el Dr. Miguel Ayuso que ya tiene a su cargo decenas de publicaciones, entre las que destacó la tan conocida por todos revista “Verbo” y los Anales que llevan el nombre de la fundación.

Fuego y Raya explicó el profesor es más que una publicación ya que está “marcada por la reacción, contra el ecumenismo que nos invade y pensada como instrumento frente a la falta de publicaciones serias en el mundo de la defensa de la hispanidad.” Nacida en largas conversaciones con sus amigos, los profesores Miguel Ayuso y José Diaz Nieva, la revista fue titulada por el Dr. Manuel Gónzalez, quien por una dolencia no se hallaba presente, luego de numerosas propuestas en las que se desecharon muchos nombres por no cuadrar acabadamente con la obra que se proyectaba.

La propuesta de Fuego y Raya como título, según las palabras del director, que en un primer momento no pareció convencerle, se convirtió luego en el nombre que todos encontraron apropiado, cuando comprendieron que era el carácter hispánico más genuino el que se describía con esos términos que evocan “el fuego que devoró los barcos de Cortés para no abandonar la empresa de España y la raya trazada en el suelo con la punta de la espada de Pizarro.”

Luego de los agradecimientos y de declarar que la revista estaba consagrada a la Virgen María, patrona y propietaria de la empresa, Juan Fernando Segovia hizo un llamamiento a la audiencia para motivar a colaborar y difundir generosamente el trabajo publicado.

Por su parte el Dr. Luis Roldán expuso sumariamente los contenidos incluidos en el primer número de la publicación.

De los artículos destacó pensamientos como “el carácter de guerra civil que tuvieron las independencias americanas, slogan tan marcado por la escuela liberal”, “la necesidad de un revisionismo”, que según la cita de Arturo Jauretche “es el trabajo de quienes se niegan a hacer política sin conocer la historia.” Conceptos que intercaló el Dr. Roldán con las palabras de revolucionarios como Bolívar traídas a cuento en el artículo Revolución e independencias. Del orden hispano-cristiano al desorden republicano de Juan Fernando Segovia, que reflexionaba luego del éxito de sus campañas militares “he arado el mar”, para mostrar cuantas promesas incumplidas dejó la Revolución.

En lenguaje agradable y ameno, ironizó; Me propongo la difícil tarea de motivar la lectura de los temas tratados en los artículos pero sin ahondar tanto en ellos que ustedes sientan que ya no necesitan leer la revista.

Como tercer conferenciante el Lic. Lagalaye tuvo a su cargo el esbozo de los artículos publicados en el segundo número de Fuego y Raya, que sintetizó prolijamente destacando entre otras la nota de José Antonio Ullate Fabo “El nacionalismo y la metamorfosis de la Nación”, explicando la diferencia de los nacionalismos frente a la doctrina clásica de Aristóteles, donde los primeros no tienden sino a unir lo igual (raza, lengua, nación) en contraposición a las enseñanzas del estagirita que precisa la “unidad de varios para colmar una necesidad en la búsqueda del bien común”.

Condimentó su exposición el historiador, explicando lo que él llamo, temas fundamentales que cruzan la revista, entre los que destacó por un lado, la legitimidad política y la denuncia de la implantación de la ideología liberal en ámbitos foráneos como lo son la hispanidad y el catolicismo.

A la postre hizo una breve intervención el delegado de la Comunión Tradicionalista en Argentina, Don Juan García Gallardo, hijo del fallecido Don José Ramón García Llorente, agradeciendo la organización del evento al Dr. Luis María de Ruschi y recordando al público que si la reconquista de la España peninsular pudo durar 800 años, pasados 200 todavía puede continuar la batalla.

miércoles, 11 de mayo de 2011

La tecnocracia y el hombre masa, camino al totalitarismo moderno

(…) Vallet define la tecnocracia como: “Una operatividad racionalizadora y cuantificadora del Estado respecto a la sociedad, que se extiende por todos los ámbitos y que tiende a conducirle al totalitarismo”

La tecnocracia encierra para Vallet la dominación del hombre y su entorno: supone la racionalización del espíritu, así como la cosificación de la vida que queda orientada hacia el artificio del bienestar material. El dominio de las cosas y el dominio del espíritu son las dos grandes áreas de actuación tecnocrática. (…)

Vallet comprende que la evolución del modelo liberal ha degenerado en una suerte de modelo de dirección de masas, principalmente a causa del auge del adjetivo “social” en el Estado. En este sentido considera que la evolución de las socialdemocracias tiende a un desenlace totalitario, literalmente dice: “Cuando exigimos del Estado que nos entregue nuestra ración de bienestar, confundiéndola con la libertad, le ayudamos a que nos imponga el totalitarismo”.

Considera Vallet que cuando se confunde la libertad con la situación del “ganado bien alimentado y cuidado”, soportaremos cuantas restricciones y límites nos imponga ese deseo de abundancia, como ganado manso y obediente que es la masa, estaremos a la espera del pasto al que nos guíen.

El nuevo “hombre masa” es caracterizado por Vallet por cuatro notas fundamentales: a) desarraigo; b) segmentación; c) pérdida del sentido de la realidad; y d) condicionalidad de su actividad a los designios de los imperantes.

El “desarraigo”, escribe Vallet, “religioso, que aísla al hombre de su origen y su fin trascendente; intelectual, producida por la pérdida del sentido de lo real, y existencial, en su relación con las cosas, con el propio medio geográfico, con los semejantes, a contar desde la familia y el medio social en que se convive, y de las raíces que le unen con las generaciones anteriores, de las que ha recibido tradiciones y costumbres”

La “segmentación” que es el resultado de la homogeneización del todo social, de una sociedad organizada mecánicamente desde el poder. El hombre queda sólo ante el poder, desprovisto de comunidades desde la que proyectar su dimensión social y la realización de sus fines.

La perdida del “sentido de lo real”, pues, como escribe Vallet, “es una sociedad masificada y mucho más si es tecnocráticamente educada y teledirigida, lo que está en el aire, en los medios masivos de comunicación, es lo que nos sirve de pauta”. Considera Vallet imprescindible “recuperar el sentido de la realidad, el sentido del orden natural, de la jerarquía de valores, los principios del derecho natural, conjunto de verdades que una razón sana puede descubrir mediante la meditación sabia y prudente del orden de los seres y las cosas”

Y la “condicionalidad” de toda actividad individual o colectiva a la necesaria supervisión, dirección y autorización del Estado. Como escribe Juan Vallet: “Pedimos todo al Estado; a él acudimos siempre que nos falta algo para obtenerlo de su omnipotencia. Olvidamos que el Estado nada puede devolver a la sociedad si previamente no se lo ha detraído de ella. Pero ese olvido, o mejor, aquella fe en el Estado, nos ata nuestra iniciativa y responsabilidad” (…)

En definitiva, para Vallet, si el nuevo modelo de Estado es el totalitarismo y el nuevo modelo de hombre es el hombre masa, no se trata de una síntesis ideológica del espíritu político sino, también una nueva ideología. La tecnocracia es, según Vallet, aquella ideología que trata de conducir o dirigir la vida pública según el criterio de “economicidad” por medio de la planificación elitista de unos pocos cerebros comandados por un líder, que goza de amplios poderes políticos y respaldados por los mass media (…)

Adolfo J.Sanchez-Hidalgo. El triángulo tecnocracia-masificación-totalitarismo en el pensamiento político de Vallet de Goytisolo. Verbo nº 491-492

jueves, 5 de mayo de 2011

Crisis y esperanza del Carlismo

“(...) solamente a la crisis de la Iglesia en la segunda mitad del siglo XX no ha podido resistir el carlismo, porque no le afecta sólo accidentalmente, sino que toca esencialmente a su soporte, que es la cosmovisión de la cristiandad. La vocación del carlismo de servir a la Iglesia se ha encontrado con que ésta, de pronto, no quiere ser servida como secularmente. Providencialmente, este rechazo de lo esencial del tradicionalismo no se ha producido desde lo esencial de la Iglesia –el dogma-, sino desde una accidentalísima concepción coyuntural de sus relaciones con el Estado y con las religiones falsas (...)

Despues de 1966, perdida la unidad católica –que fue pilar fundamental tanto de la civilización española como del ideario político del carlismo-, se produce un declinar no remontado ni por aquella ni por éste. Esto explicaría la ausencia notoria de un tradicionalismo vigoroso y operante en el posfranquismo. Y abona la hipótesis de un resurgimiento del carlismo coincidiendo con un saneamiento de la Iglesia”