Editoriales

sábado, 26 de febrero de 2011

Fortaleza y coraje en el militante católico

Se dirá que el coraje, el valor o la fortaleza es una virtud moral que nada podrá desmedrar mientras inspire una actitud firme frente a los obstáculos que la variada suerte de cada hombre opone a sus proyectos. El burgués no es más cobarde que cualquier otro tipo humano y aunque su apego a los bienes terrenos no haga mucho por desarrollar en él un sentido heroico de la vida, su indudable disposición hacia el dominio de las cosas le lleva a enfrentar con decisión todas las dificultades que surgen en el camino del éxito. Esto es también fortaleza y aunque muy limitada a los peligros físicos y totalmente desprovista de aquella magnanimidad y magnificencia que da a la pasión de los héroes y los santos su proyección trascendente.

Se ha dicho, con gran exactitud, que el objeto principal de la fortaleza es el más grande peligro que el hombre puede correr. Esto se ve claro frente a la posibilidad de la muerte. La fortaleza consiste en la aptitud para enfrentar tales peligros: "propter aliquod bonum consequendum" (A causa de algún bien que debe conseguirse) como afirma Santo Tomás. Para esto, añade el Santo Doctor, debemos prepararnos mediante una larga meditación previa, a sacrificar todos los bienes particulares y, en primer lugar, la propia vida, en orden a la consecución de un bien más noble(Summa Theologica II, IIae Q. 123).

En esta perspectiva teológica, la fortaleza no es solamente capacidad para enfrentar eventuales peligros, sino la lúcida aceptación del sacrificio supremo, en la serena integridad de quien ha elegido el bien mejor y esto no puede suceder si no va acompañado de un profundo saber sobre el sentido último de la vida. Un coraje sin sabiduría, propio del temperamento bravío, no es fortaleza en sentido estricto y la ignorancia de los fines convierte el coraje en su deformación más vil que es la violencia. Violencia y poltronería son los vicios que conforman el ánimo de la irascibilidad burguesa.

Rubén Calderón Bouchet. El espíritu del Capitalismo

La AUSTERIDAD virtud social y militante.

El Islam, la democracia "a la turca" y el Nuevo Orden Mundial

Parece que los EEUU se han embarcado este año en la tarea de extender la democracia “a la turca” en los estados mahometanos del norte de África y algún otro de Oriente Medio. Bueno, en realidad esa es la tapadera o excusa para la opinión pública mundial (es decir, la consigna para los medios de comunicación) Después del fracaso de los disturbios sucedidos en Irán en 2009, tras las elecciones en dicho país, parece que ahora lo intentan por otro flanco. Cuando se escriben estas líneas han caído los gobiernos de Túnez y Egipto; el presidente de los EEUU no se recata en incitar públicamente a los iraníes a la repetición de la revuelta, ahora con aquellos éxitos recién logrados. Ya se va viendo hacia donde apunta esta ola de revoluciones en los países musulmanes. Pero tampoco hay que esperar que el único objetivo de esta serie de revueltas sea Irán. La actual situación en Libia, con el régimen de Gadafi acorralado y al borde de la guerra civil así lo deja entrever.

La estrategia yanqui sigue el modelo de la revolución turca pero no es fácil extender la democracia occidental y laica a unas poblaciones mahometanas para las que política y religión son inseparables. El “entusiasmo” de los musulmanes por la democracia se puede apreciar en el caso de Túnez. Una vez derribado Ben Alí, los tunecinos, que acaban de “luchar por su libertad” y vencer (¡?), en lugar de quedarse en su país para disfrutar della ¡emigran en masa a Italia! Y eso sabiendo que en el momento actual de crisis, no sobra precisamente el trabajo allí. Quizá también presientan que el nuevo régimen va a ser peor aún que el anterior. Lo cual nos lleva a recordar que los gobiernos títere de Irak y Afganistán han batido todos los records de corrupción, algo que parecía imposible en el mundo mahometano. O quizás el papel de los países musulmanes en el Nuevo Orden Mundial (NOM) liberal sea inundar con sus emigrantes Europa y el Gobierno Provisional Tunecino se esté apresurando para “hacer los deberes”. Casi con seguridad serán las tres cosas a la vez.

La historia reciente nos muestra que estas torpezas de los yanquis redundan siempre en beneficio de los islamistas (que es lo mismo que en beneficio del Islam, por mucho que se empeñen los progres en separar los conceptos) De este mismo modo llegaron los “ayatolas” al poder en Irán en 1979, con el apoyo de EEUU y contra el hasta entonces “amigo del pueblo americano”, el Sha de Persia. También se aliaron con los “temibles” talibanes en Afganistán, cuando los invasores eran los soviéticos. Y, más recientemente, en 2008, los yanquis han organizado el estado independiente, tan artificial como islámico, de Kosovo ¡para los terroristas de la UCK! De este modo no solo favorecen a los terroristas, sino también a Turquía y Albania (justo los estados mahometanos de la zona) en los Balcanes. Así ahora, en Egipto quienes resultan más beneficiados son los Hermanos Musulmanes, los asesinos del presidente Sadat en 1981 y los más crueles perseguidores de cristianos coptos en el país del Nilo.

En España ya estamos sufriendo un régimen aparentemente democrático y que, en realidad es la dictadura tecnocrática de una casta de parásitos (PPSOE) sin escrúpulos y cuyo principal rasgo común es su odio anti católico y su estupidez liberal y post moderna. El nuevo “orden” que va surgiendo en los países mahometanos es, según el modelo turco ya citado, el de un ejército fuerte y controlado por EEUU (no es casualidad que en Egipto sean los militares los que, finalmente, han derrocado a Mubarak) y una población cada vez más dominada por los islamistas, que es la versión laica para la Nueva Era mahometana. Este predominio social de los islamistas se verá reflejado en las nuevas partitocracias emergentes (y que no serán muy diferentes de las que actualmente tienen el poder en Irak y Afganistán) con lo que los partidos islámicos se harán fácilmente con los nuevos estados. Justamente es el caso de Turquía.

Veamos un ejemplo concreto que ilustre estas afirmaciones. El de la libertad religiosa. Demagogia aparte, en realidad significa retirar crucifijos e imponer el pañuelo femenino mahometano o incluso el Burka (caso de Lérida); cerrar iglesias y abrir mezquitas; criminalizar a los católicos (calificados como racistas si pretenden defenderse) y apoyar y financiar a ultranza a los inmigrantes mahometanos, aunque se hinchen a delinquir; ocultar la información crucial del 11M y hasta hacer desaparecer pruebas y luego, eso sí, rasgarse las vestiduras en el primer aniversario de la matanza… mientras se invita a Mohamed VI al mismo, etc, etc.

Y eso en un país que ¡todavía es mayoritariamente católico! Claro que, teniendo en cuenta la rapidez y profundidad de la descristianización actual de España, esa mayoría, además de ser muy frágil por la herejía modernista que la infecta, va a durar muy poco. Y con ello cuentan los tiranos que nos engañan y nos oprimen y el NOM a quien sirven.

Boina Roja Montaraz

domingo, 20 de febrero de 2011

¿Es legítimo el régimen actual? por Miguel Ayuso. Conferencia de la A.E.T en Salamanca

Invitado por la Agrupación de Estudiantes Tradicionalistas, el miércoles veintitrés de febrero, a las siete y media de la tarde, en el Aula Francisco de Vitoria de las Escuelas Mayores (Edificio Histórico de la Universidad de Salamanca), pronunciará una conferencia bajo el título "¿Es legítimo el régimen actual? Un análisis de derecho positivo" el profesor Miguel Ayuso Torres. La entrada es libre.

Miguel Ayuso Torres nació en Madrid en 1961. Es Profesor Ordinario (catedrático) de Derecho Constitucional en la Universidad Pontificia de Comillas (Madrid) y ha dictado cursos y participado en proyectos de investigación en numerosas universidades europeas y americanas. Pertenece también al Cuerpo Jurídico Militar, donde ingresó por oposición en 1984. Ha sido Letrado del Tribunal Supremo (1993-2000). En la actualidad es Presidente de la Unión Internacional de Juristas Católicos, con sede en el Vaticano.

Académico correspondiente de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, donde es coordinador del Seminario de Derecho Natural y Filosofía del Derecho. Director científico del Consejo de Estudios Hispánicos Felipe II. Secretario del patronato de la Fundación Francisco Elías de Tejada. Miembro del comité directivo de la sección española de la Sociedad Internacional Tomás de Aquino (SITA). Presidente de la Confederación Española de Juristas Católicos "San Raimundo de Peñafort". Vicepresidente del Institut International d’Études Européennes "Antonio Rosmini" (Bolzano). Pertenece también al Instituto de Estudios Hispánicos (Las Palmas de Gran Canaria) y al Eric Voegelin’s Institute de la Universidad del Estado de Luisiana (Baton Rouge). Presidente del Grupo Sectorial en Ciencias Políticas de la Federación Internacional de Universidades Católicas.

Secretario de redacción de la revista Verbo y director de Anales de la Fundación Francisco Elías de Tejada, pertenece al consejo de dirección de Razón Española (Madrid), Synalagma (Oporto), Instaurare (Údine), Revista Internacional de Filosofía Práctica (Buenos Aires), Ius Publicum (Santiago de Chile), Fuego y Raya (Córdoba, Argentina), etc.

Autor de numerosos libros (varios de ellos traducidos al portugués, italiano, francés, inglés, alemán y polaco) y centenares de artículos, tanto en revistas especializadas como en prensa diaria (ABC, El Pensamiento Navarro, El Mercurio de Chile, La Nación de Buenos Aires, La Razón de Lima, etc.). De sus libros destacaremos, en el campo de la historia del pensamiento político, sus estudios sobre Francisco Elías de Tejada (1994) o Rafael Gambra (1998), así como --en lo que concierne a la teoría jurídico-política y al derecho público-- sus monografías sobre la crisis del Estado, ¿Después del Leviatán? (1996) y ¿Ocaso o eclipse del Estado? Las transformaciones del derecho público en la era de la globalización (2005); sobre el problema de la Constitución, El ágora y la pirámide (2000); sobre las transformaciones del poder, La cabeza de la Gorgona. De la hybris del poder al totalitarismo moderno (2001) y sobre el binomio legalidad-legitimidad, De la ley a la ley (2001). Asimismo Las murallas de la Ciudad. Temas de pensamiento tradicional hispánico (Buenos Aires, 2001); El derecho natural hispánico: pasado y presente (Córdoba, 2001); Chesterton, caballero andante (Buenos Aires, 2001); Qué es el carlismo. Una introducción al tradicionalismo hispánico (Buenos Aires, 2005); Dalla geometria legale-statualistica alla riscoperta del diritto e della politica (Madrid, 2006); La política, oficio del alma (Buenos Aires, 2007); Carlismo para hispanoamericanos. Fundamentos de la unidad política de los pueblos hispánicos (Buenos Aires, 2007); La constitución cristiana de los estados (Barcelona, 2008).

Sobradamente conocido en medios académicos, jurídicos y eclesiásticos, Miguel Ayuso ha saltado recientemente a la fama entre el gran público por sus intervenciones en los debates del programa de Intereconomía TV "Lágrimas en la lluvia". Conferenciante muy celebrado por su claridad y brillantez, hace tres años estuvo en esta Universidad para hablar sobre "La Hispanidad como contraglobalización".

Salamanca tradicional...¡POR DON SIXTO ENRIQUE DE BORBÓN!

sábado, 19 de febrero de 2011

La Europa mercantilista y liberal en el origen de la crisis que asola España

El orden previsto para la Europa que nace no tiene nada de común con el orden que existió en la cristiandad. La democracia igualatoria ha sucedido a la ordenación jerarquizada de los valores. No hay reyes responsables por sí mismos, sino reyecillos constitucionales o presidentes de república con las manos atadas. Si alguna vez se llegan a superar las dificultades de los nacionalismos heredados del siglo XIX será para acabar en un parlamento europeo, resumen y compendio de los parlamentos de cada uno de los estados integrados. Todo ello bajo el signo omnipotente de los principios de la declaración francesa de 1789, al amparo de los dos lemas de la Reforma y de la Revolución. Porque lo que contará, en suma, para la unificación de la Europa del futuro, es la economía a secas, un primado de lo económico que implícitamente viene a reconocer la doctrina marxista del primado de la economía, tema respecto al cual son superestructuras subordinadas la fe religiosa, el derecho justo, el orden político, las creaciones del arte o los sistemas de la filosofía. La Europa a que vamos es marxista, porque lo que importa es la economía, siendo indiferentes la fe en Dios o la justicia entre los hombres; de ahí que empiece por el Mercado Común, por el mercado del trueque y del negocio.

Francisco Elías de Tejada. "La cristiandad medieval y la crisis de sus instituciones" en Verbo nº 103 marzo de 1972.

LA CRISIS ¿Sólo económica?. La Europa que ha perdido el rumbo (III)

lunes, 14 de febrero de 2011

La falsificación del ethos occidental, por obra del liberalismo.

El liberalismo modificó la sustancia ontológica y moral del país...¿Cómo es eso? ¿No es un sistema político y económico? ¿Qué tiene que hacer aquí la moral?

Que el liberalismo ha sido el sistema económico y político del capitalismo (libre cambio, individualismo económico, guerra comercial, resortes ocultos de la trata, trabajo a base de papel y crédito, Bolsa y Banca, Bolsa y Banca...con sus resultados sociales, por un lado; democratismo, Parlamento, división de poderes, sufragio universal...con sus resultados políticos por otro), eso es de sobra sabido; lo que no es tan fácil de ver son las condiciones de posibilidad de este sistema (que es en el fondo el surgir del poder del Oro y del ethos del comerciante- y no del buen comerciante , de adehala) consistentes en una profunda subversión de la ética de occidente; y más hondo todavía, en una nueva concepción del Hombre y del Universo, que se puede llamar "ontológica".

Werner Sombart y Max Weber han estudiado minuciosamente la ética del capitalismo y sus raíces en la teología calvinista: trabajo hecho.

Es preciso saber ver que la moral ha sido cambiada; la religión liberal creó su moral propia, trastornando profundamente la moral cristiana: es menester que la gente se entere de eso. Una cantidad de pecados y crímenes dejaron de serlo (como la usura, la expoliación subdola y las estafas financieras para empezar) y otros cobraron importancia desmesurada. La moral occidental no solamente se hundió, sino que en cierto modo se dio la vuelta: la popa y una chimenea se alzarón a las alturas al hundirse la proa, como el Titanic cuando zozobró. Y el "iceberg" fue una nueva concepción del hombre, el homo oeconomicus, el ser humano considerado solamente como sujeto de producción y consumo. Ahorcar a un hombre por robar una oveja (como se hizo en Inglaterra desde 1750 hasta 1890) y no ahorcar al dueño de las ovejas, que las robó todas a un monasterio con monasterio y todo, puede ser una imagen cruda de lo que vamos diciendo.

La misma santidad de la familia palideció en frente de la santidad de la Banca- y del Estado (...) Los delitos contra el espíritu se hicieron tan invisibles como el mismo espíritu: la herejía, de la cual los antiguos decían que era "parecida y peor que falsificar moneda", se volvió hasta un mérito; y hoy día, una indudable ventaja; en tanto que los reyes, por medio de la "inflacción" (el primero de todos Enrique VIII de Inglaterra) se dieron a falsificar moneda (...)

Si esto es catolicismo, yo soy musulmán(...)

P. Leonardo Castellani. Pluma en ristre.

Ética y negocios: El nacimiento de las plutocracias.

miércoles, 9 de febrero de 2011

El enemigo es el SISTEMA, ¡Católico!, tu opción política: el Carlismo.

Pero ¿cómo se restaura el espíritu que anima las tradiciones? ¿Cómo se restauran las creencias católicas, que eran centro del espíritu tradicional, y se las difunde por todos los miembros de nuestra sociedad, devolviendo la vida a los que están yertos o aumentando la energía de los que aun no han sucumbido, llevándolas hasta la cima del poder para que recobren en el Estado su imperio? No se puede contestar a esta pregunta sin examinar la última parte, por cierto importantísima, de la fórmula de la unión de los católicos, que se refiere al procedimiento y a la conducta para la reconquista de la tesis perdida.

Los medios legales y pacíficos, la evolución prudente, es lo que preconiza como el mejor método de restauración católica. Y a este procedimiento se le considera de tal modo importante, que, discrepar de la regla de conducta que él señala, es romper abiertamente con la fórmula de unión; por lo cual bien puede decirse que, más que procedimiento, es uno de sus principios capitales.

¿Y cuáles son los fundamentos en que se apoya? Un error de estrategia y una táctica opuesta a todas las que se han conocido en la historia de las luchas políticas y militares. El error de estrategia es precisamente, en lo que se refiere a la conducta, la causa principal del estado de la Iglesia en España y de la situación de los católicos españoles. ¿Y en qué consiste ese error de estrategia? Consiste, señores, en que estamos siempre a la defensiva y no tomamos la ofensiva nunca. Todo se reduce a parar los golpes fuertes, a resistir cuando nos atacan mucho, y mientras tanto a descansar en la inercia, esperando descuidados la nueva acometida. Aun los momentos heroicos de las luchas cruentas, a que debemos todo lo poco que conservamos, tuvieron más su origen en las agresiones de los adversarios que en las iniciativas propias. Y no hay que decir lo que ha sucedido en los largos períodos de paz material y de lucha moral. Esta es la razón, señores, de que nuestra historia contemporánea resulte una serie de treguas y de armisticios que suelen acabar en pactos que llevan aparejada una infamante servidumbre.

(...) Señores: con esta estrategia se puede hacer el recuento de todas las batallas que se han perdido, pero no es posible empezar la lista con una sola que se haya ganado (...)

¡Que se deben emplear los medios legales y pacíficos! ¿Quién lo duda? Pero ¿acaso esos medios son suficientes, no ya para restaurar la tesis católica, sino para mejorar, de un modo estable, de suerte, y poder poner en peligro al adversario? ¿Cuándo se ha hecho una revolución católica, es decir, una restauración de la verdad, dentro de la ley enemiga y contra el poder que la ha establecido y que la mantiene violando los derechos de la Iglesia? (...)

Juan Vázquez de Mella. La persecución religiosa y la Iglesia independiente del Estado Ateo. Obras completas, volumen quinto.

Los Principios no negociables: Dios, Patria y Rey.

sábado, 5 de febrero de 2011

P. Leonardo Castellani: El Orden, la Iniquidad y la decadencia de Occidente.

Hay algo que ataja la manifestación y el triunfo (la gran Apostasía) del Anticristo; cuyo espíritu sin embargo ya entonces está en obra; como ya nota también San Juan: "muchos se han hecho ahora Anticristos". Ese algo San Pablo lo pone en neutro y en masculino, participio presente: Lo que Ataja y El Atajador. San Pablo había dicho a los cristianos de Tesalónica qué cosa era ese Obstáculo-Obtaculizante misterioso; "a ellos sí, pero no a nosotros", exclama San Agustín. Sin embargo él, como los demás antiguos padres, vieron el Obstáculo en el Imperio Romano, que con su organización política, su genio jurídico, su disciplinado ejército y su férrero orden externo, impedía la explosión de la Iniquidad siempre latente; y en el masculino participio presente, al Emperador.

Tanta fue así que al periclitar y disgregarse el Imperio de Roma bajo las invasiones bárbaras, y al disminuir gradualmente la autoridad de los Emperadores, ante la asunción del poder absoluto por los reyezuelos comandantes del Ejército, en grandes fragmentos del Imperio, creyeron los cristianos cercano el Anticristo. Cuando la segunda invasión y saqueo de la Urbe por los vándalos, San Jerónimo desde Belén escribe a Ageruchia que probablemente están cercanos los tiempos novísimos y el Anticristo.

No se reveló el Anticristo. Y entonces la exégesis patrística rectificó su punto de mira sin abandonarlo: el Imperio Romano es el Obstáculo; pero no propiamente su Emperador personal, sino su estructura formal, el Orden Romano, que se conserva y aún se completa en la inmensa creación político-cultural llamada la Cristiandad europea. Newman admite que el Imperio ha durado hasta sus días, en los "diez Reinos" que de él brotaron; e incluso un "Emperador de los Romanos" ha habido siempre hasta la Revolución Francesa, nominal al menos y no sólo nominal en los más grandes dellos, Carlomagno y Carlos Quinto. Napoleón Bonaparte quitó su título y su poder al último Rey del Sacro Imperio Romano Germánico, Francisco II de Austria, creando en 1806 la Confederación del Rhin, preludio de la inminente hegemonía de Prusia. Santo Tomás en su Comm. ad Thess. II, después de preguntarse: "El Imperio Romano cayó y no se reveló el Anticristo..." responde tranquilamente: "El Imperio no ha desaparecido", y se remite al Sermón de Pascua de San Gregorio el Magno.

El orden más o menos imperfecto pero vigente desta que llaman hoy la Civilización Occidental atajó hasta hoy la inundación de la Iniquidad. Hoy vemos dos fuezas universales poderosísimas, Capitalismo y Comunismo, en la tarea de destruirla; aunque el Capitalismo diga que su intención es defenderla; pues tiene la insensata pretensión de conservar sus frutos destruyendo su raíz; o para hablar como el Evangelio: quiere primero la Añadidura y después el Reino de Dios; o sin el Reino de Dios.

Ésta es la interpretación más sólida y respaldada del Katéjon de San Pablo (...)

P. Leonardo Castellani. El Apokalypsis de San Juan.

jueves, 3 de febrero de 2011

Para rezar, leer y combatir: Novedades en la Librería Católica.

Querido amigo:

En La Librería Católica trabajamos para poner a su disposición libros de contenido católico o compatible con la fe católica. Libros que, muchas veces, resultan difíciles de encontrar en otras librerías. En esta ocasión le sugerimos algunos títulos de especial interés, además, al mejor precio. Son nuestras recomendaciones para usted en el mes de febrero. Esperamos que sean de su interés.

Destacamos la oferta de lanzamiento de un clásico muy oportuno para este tiempo de abandono de la inteligencia: El Catecismo de la Suma Teológica, de Thomas Pègues O.P., revisado y ampliado por Eudaldo Forment (su precio normal es de 24€, pero durante el mes de febrero lo podrá adquirir por 21,50€ ). Recomendamos especialmente la biografía del cura Santa Cruz escrita por Gaëtan Bernoville, La Cruz sangrienta, una obra clásica y apasionada que entusiasmará a todos los católicos con las increíbles aventuras del guerrillero carlista.

No queremos pasar por alto El fin del mundo y los misterios de la vida futura, obra emocionante que marcó la vida de Santa Teresita de Lisieux, ni tampoco Rescoldo, de Antonio Estrada, sin duda la mejor novela sobre los cristeros, que también resulta muy necesaria ahora, cuando los católicos podemos estar tentados de derrotismo.

Por último, El Apokalipsis de San Juan, escrito por el genial Leonardo Castellani, le ayudará a adentrarse en las páginas proféticas del último libro de la Sagrada Escritura: un superventas de estas pasadas navidades.

In Domina nostra, La Librería Católica
P.D. Le invitamos a visitar también nuestro catálogo y le recordamos que si no encuentra algún libro sólo tiene que solicitárnoslo y lo buscamos para usted.